Paraguayos en España

Recomendaron pensar muy bien antes de emprender viaje a la madre patria

Ocho paraguayos fueron repatriados ayer desde España, debido a la crisis en España

 En menos de tres meses fueron repatriadas 47 personas, en cuatro grupos, según la dependencia estatal. “Está muy complicada la situación allá. No hay trabajo. Tenés que rebuscarte por cualquier cosa para sobrevivir”, relató Egidio Peña, oriundo de Encarnación, quien volvió ayer a nuestro país después de ochos años de permanecer en España. El compatriota a su arribo al “Silvio Pettirossi” se mostró muy emocionado al reencontrarse con sus familiares, que también le aguardaban impacientes.

Peña explicó que los primeros años de su estadía en España fueron buenos. Sin embargo, dijo que los últimos dos años empezó a faltar trabajo y era imposible continuar viviendo en la Madre Patria. Expresó que a pesar de ser albañil, su último empleo fue de cuidador de una persona de 96 años de edad. Después de la muerte del anciano ya no consiguió empleo en ningún rubro, pese a contar con la residencia española.

Señaló que en el Viejo Continente se trabaja mucho y que muy pocos tienen la suerte de tener un buen salario. Sostuvo que los gastos por alimentación, vivienda y vestimenta son muy abultados, por lo que resulta prácticamente imposible tener una vida digna en España. Indicó que los paraguayos sufren mucho en el país europeo y que por esa razón él decidió solicitar la ayuda de la Secretaría de Repatriados para regresar, junto a sus dos hijos y esposa. “Yo lo único que puedo decir es que por el momento yo no recomiendo a ningún compatriota que vaya a España en busca de trabajo porque la crisis está fatal”, expresó Peña.

Por su parte, Lucía Cantero, quien también formó parte del grupo de repatriados de España, expresó que en el país europeo se necesitan entre 800 y 1.000 euros (unos G. 4.720.000 a 5.900.000 guaraníes al cambio actual) para poder sobrevivir y hacer frente a los gastos. Indicó que el alquiler de una vivienda modesta cuesta unos 500 euros (unos 2.950.000 guaraníes), mientras el sueldo promedio es de 900 euros. “Está difícil la situación. No hay más trabajo y si tenés hijos contigo sí o sí necesitás un lugar donde vivir porque hay patrones que sin piedad también te echan a la calle por cualquier motivo”, indicó la compatriota oriunda de la ciudad de Caacupé.

La mayoría de los paraguayos repatriados ya formaron familia en España, con hijos nacidos en ese país. Se dedican a cuidar ancianos, a realizar tareas de albañilería y domésticas, pero estos tipos de empleos empezaron a escasear, según mencionan los que regresan. La crisis en la Madre Patria comenzó hace unos tres años y con el paso de los meses se fue agravando. Existen datos de que al no tener otras alternativas, muchas paraguayas se dedican a la prostitución para poder seguir ayudando con remesas a sus familiares que viven en Paraguay. También denuncian discriminación en las instituciones educativas hacia los hijos inmigrantes porque la crisis genera xenofobia.