Descubre todo lo que Madrid puede ofrecerte estos días festivos: arte, fiesta, gastronomía, actividades en familia..
Una de las cosas buenas que tiene Madrid, es que aunque solo tengáis cuatro días libres para visitarla, da tiempo de volverse con la sensación de haber visto lo mas importante. Para eso os vamos a echar una mano con esta selección de cosas que podéis hacer en Madrid en Semana Santa. A las torrijas y las procesiones se suman muchos otros planes para hacer con los amigos, la pareja o la familia en Madrid. Cuatro días de turismo diferente y de diversión asegurada. Y si os quedáis con ganas de mas, siempre podéis volver a visitar la ciudad en otra época.
Mira el paso de alguna procesión oficial
La procesión mas famosa de Madrid es la del Cristo Medinaceli, que tiene lugar el Viernes Santo y recorre las principales calle del centro de la ciudad desde la parroquia de Jesús de Medinaceli. Hay ademas otros pasos famosos que son sacados estos días como el de los Alabarderos, Jesús Nazareno "el podre" y la procesión del silencio. Seas religioso o no, merece la pena ver la emoción con la que los madrileños pasean a sus santos y como se engalanan las vías mas céntricas de la capital.
Prueba las torrijas madrileñas
El típico postre de Semana Santa es todo un éxito en Madrid. No importa si te gustan con leche, con vino o solas, encontraras de todos los tipos en los bares y restaurantes de la ciudad. Son famosas las que sirven en la Casa de las Torrijas, una de las tabernas mas antiguas y castizas de Madrid. Situada junto a la puerta del sol, sirven torrijas todo el año, ademas de ser típica bodega donde camareros que llevan décadas trabajando allí te sirven tapas de chatos de vino. Si prefieres un local moderno y espacioso, en las Pastelerías Mallorca encontraras este típico postre también. Y ademas en Vait pastelerías puedes probar sus torrijas premium con Baileys, vodka, ron y bourbon, entre otras.
Aprovecha para conocer las
iglesias y catedrales
Madrid esta llena de iglesias y catedrales con encanto que lucen ahora sus galas. Mas allá de la Almudena la ciudad esconde pequeños y grandes templos llenos de belleza. Por ejemplo, la Basílica de San Francisco El Grande, en el barrio la latina, contiene un impresionante cúpula y ofrece unas vistas espectaculares del atardecer madrileño en el mirador adjunto a la iglesia. No os perdáis tampoco la de San Jerónimo El Real, un antiguo monasterio del que solo han quedado en pie la iglesia y un claustro, ni la de San Antonio de los Alemanes, cubierta desde las paredes hasta la cúpula con frescos llenos de detalles.
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